Desde el primer día que el bebé toma leche y antes de que los dientes hayan salido, es indispensable limpiar las encías para evitar complicaciones como infecciones.
Es apropiado limpiarlas dos veces al día.
Para hacerlo de la manera adecuada, use una toalla limpia o gasa esterilizada y humedézcala con agua, pero sin usar pasta dental.
También puede utilizar un cepillo de cerdas suaves, cuando ya le hayan salido los dientes a su hijo.
No olvide antes de ponerlo a dormir, realizar el procedimiento frotando suavemente las encías con la gasa húmeda.
Si no se mantiene el cuidado dental necesario, es posible que se den infecciones bacteriales, inflamaciones o caries.
Una de las enfermedades que se presenta es la candidiasis oral, que se produce por levaduras que se transmiten en la lactancia. La húmeda boca del bebé es un sitio ideal para que se desarrolle. Se reconoce porque se presentan manchas blancas y enrojecimiento en las encías. El tratamiento se hace con antibióticos.
Extraído del siguiente documento:
http://www.abcdelbebe.com/node/81
Visitado el 2010-10-29
Publicado por: Oyuki Amador, Mercedes Cortés, Dulce Miramontes, Melissa soqui, Jhoana Soto.
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